Domingo día 5 de noviembre, son las 7 de la mañana y un nutrido grupo de ciclistas del club DHGTEAM, nos disponemos a partir, hacia tierras de Portomarín para participar en la III edición cicloturista Ruta das Anguias.
Nos recibe parte de la organización de Os Anguias Btt y como siempre el trato es exquisito y cordial casi me atrevo a decir de total camaradería.
Van pasando los minutos y se empieza a llenar la palaza del Ayuntamiento de Riders, dispuestos a pasar una mañana del domingo, disfrutando de la bici y de la ruta que nos tienen preparada nuestros amigos de Os Anguias.
Pasadas las 9:30 se da la salida y los 300 participantes empezamos a dar pedal.
Después de una bajada de casi 1 km nos adentramos en la ruta, que como el año pasado los primeros kilómetros trascurres por el embalse, ya que la falta de agua, nos permite disfrutar de un Portomarín sumergido que solo en los años de sequía sale a la luz del sol.
Después de recorrer unos cuanto km por le embalse empieza la ruta, que como no puede ser de otra manera y para que no nos enfriemos, comienza con una subida que a mas de uno les obligo a poner pie en tierra.
La ruta discurre por senderos, por pistas forestales y por unos singletracks que nuestros amigos de Os Anguias Btt han hecho para disfrute de todos los amantes de la bici, en especial los que nos gusta el enduro.
Atravesamos fraguas, pinares, escolleras y con todo esto llegamos al alto de Bagude, desde donde me detengo a contemplar el rio Miño, que este año no tiene la majestuosidad ni la grandiosidad por falta de agua en su cauce. Como si la vista no fuera lo suficiente bonita, se nos suma una niebla que desciende hasta al cauce del rio, haciendo que parezca que estamos tocando el cielo.
En este punto quedan ya pocos kilómetros para el avituallamiento, ese avituallamiento que muchos anhelamos, ya que vamos con las fuerzas justas.
Por fin en el kilómetro 22 aparece esa carpa blanca con un montón de corredores rodeandola y ahí delante nuestros ojos, aparecen los acuarios, aguas, plátanos, bizcochos y sándwiches que nos tenian preparados para reponer fuerzas y seguir camino hasta la meta.
Con las pilas cargadas nos disponemos a seguir ruta para llegar al fina, no sin antes disfrutar de un tramo nuevo, algo endurero entre un bosque de carballos, por donde teníamos que hilar muy fino para que los manillares de las bicicletas no quedaras atrancados entre los árboles. A este nuevo singletrack lo llaman DHGTEAM en honor a nuestro club, que todo sea dicho de paso, volvimos ser el club mas numeroso en participación.
Después de esta bonita bajada donde unos mas que otros la disfrutamos, volvimos llegar al cauce seco del embalse por donde discurren los últimos kilómetros de la ruta, y donde una vez mas nuestros amigo de Os Anguias Btt nos tiene reservada una sorpresa. Tienen un banco hecho con palets y un roller con su escudo y la ruta, para hacernos una foto, como si de un photocall se tratara. Sin dudad se sacaron fotos divertidas y es un gran recuerdo para todos los que participamos.
Ya solo nos queda llegar a meta, donde nos espera una ducha de agua caliente y como no unas cervezas con un buen pincho de empanda de anguilas.
La ruta remata como no puede ser de otra manera con una excelente comida y como dije antes con el premio al club mas numeroso.
Solo me queda añadir, los agradecimientos y para ser justos y no puede ser de otra manera al Club Os Anguias Btt por la excelente ruta, el trabajo realizado, al trato dispensado hacia todos nosotros. Sinceramente creo que se puede hacer igual mejor lo veo difícil.
Y por último dar gracias a este Club al que pertenezco y que nunca defrauda Gracias DHGTEAM.